Sin duda alguna Kim Kardashian fue una de las protagonistas de la pasada Met Gala, todo gracias a su atuendo: un vestido que usó Marilyn Monroe para cantarle Feliz Cumpleaños al presidente John F. Kennedy en 1962. Aunque muchos aplaudieron su elección, a quien pareció no agradarle el gesto fue a uno de los diseñadores de la histórica pieza.
Bob Mackie fue quien bocetó el vestido para la actriz y modelo cuando tan solo tenía 23 años y era asistente del diseñador Jean Louis. Mackie, de ahora 83 años, dejó claro que no le agradó ver a Kim con el vestido creado especialmente para Monroe. Según él, solo ella podía usarlo.
«Pensé que fue un gran error. Marilyn era una diosa. Una diosa loca, pero una diosa. Era simplemente fabulosa. Nadie fotografía así. Y se hizo por ella. Fue diseñado para ella. Nadie más debería ser visto en ese vestido», aseveró Mackie a Entertainment Weekly.
Aunque Kardashian solo llevó el vestido por unos minutos para ser fotografiada (durante la gala utilizó una copia), historiadores también han criticado la decisión de la socialité y empresaria. En concreto, Justine De Young y Scott Fortner tildaron la acción de “irresponsable e innecesaria”.
«Una pieza tan icónica en la historia de Estados Unidos no debería de ponerse en riesgo o de daño solo por un subidón de ego y una sesión de fotos», refirió De Young a People.