Un nuevo conflicto se ha originado este jueves por el corredor de autobuses que puso en marcha el Gobierno en la avenida Charles de Gaulle.
Chóferes de carros de concho que operaban en la ruta Charles-Sabana Barrio están protestando debido a que, según dijeron, agentes de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett) les están reteniendo sus vehículos a pesar de que, explicaron, su ruta no choca con el corredor pues su destino no es el mismo que el de los autobuses.
Al lugar se han presentado decenas de militares, policiales y unidades antimotines.
Johnny Díaz, quien se identificó como uno de los chóferes de esta ruta, mostró una herida en el brazo izquierdo que dijo le fue ocasionado mientras policías lanzaban bombas lacrimógenas. Aseguró que hay otro cuatro chóferes heridos.
«Se están llevando todos los vehículos sin pedir papeles ni nada… nosotros lo que queremos es trabajar», expresó.
El conflicto ha provocado un gran taponamiento en la avenida Charles de Gaulle, como en la carretera vieja de Sabana Perdida, que es paralela a la concurrida vía.
Intervención Policía Nacional
En ese orden, el presidente de la Federación Nacional de Transporte La Nueva Opción, Juan Hubieres, denunció que cientos de choferes son atropellados y obligados por la Policía Nacional y el Instituto de Tránsito y Transporte Terrestre a sacar sus unidades del corredor Charles de Gaulle.
Explicó que las autoridades continúan incautando los vehículos de los choferes que trabajan en esa avenida, provocando un ambiente de tensión.
Señaló que la situación se ejecuta pese a un acuerdo firmado con el Gobierno, el cual permitiría que los choferes continuaran trabajando hasta buscarle una solución a la problemática.
“ Queremos trabajar” es la consigna que expresan los trabajadores del volante mientras autoridades forcejean para incautar sus unidades, arrestarlos y colocarles multas de hasta 30 mil pesos”; expresó el sindicalista.