DETROIT — Miguel Cabrera conectó tres imparables, y se colocó a uno de los 3.000 hits en su carrera, en la derrota de los Tigres de Detroit 5-3 ante los Yanquis de Nueva York en una fría noche de miércoles en el Comerica Park.
El venezolano conectó un sencillo dentro del cuadro en la segunda entrada y otro sencillo al jardín central en el cuarto inning ante Luis Severino. En el sexto, sonó otro indiscutible por el lado del campocorto ante Chad Green.
«Realmente tuve mucha suerte en un par de esos hits y perdimos el juego, así que no estoy muy emocionado en estos momentos», declaró Cabrera. «Este juego es complicado».
Los 17.268 fanáticos se pusieron de pie tan pronto como los Yanquis hicieron el tercer out del octavo inning. El público guardó un silencio absoluto cada vez que Clay Holmes se disponía a lanzar al plato, y Cabrera se ponchó con un sinker en cuenta de 1-2.
«Fue un tanto espeluznante», dijo el manager de los Yanquis Aaron Boone. «Me alegra que no lo haya conseguido en ese momento».
Cabrero dijo que no estaba pensando sobre el momento de llegar a los 3.000 indiscutibles.
«Estaba pensando en enfrentarme a un tipo que lanza sinkers de 97-98 millas», comentó. «Estaba abriendo la entrada, estábamos perdiendo el juego y yo necesitaba embasarme. No lo logré».
El venezolano, ahora de 39 años, ha sido invitado 11 veces al Juego de Estrellas, tiene cuatro títulos de bateo, presume dos trofeos de Jugador Más Valioso y es ganador de la Triple Corona de bateo.
«Todo el mundo conoce la trayectoria que ha tenido Miggy y todo lo que ha logrado, pero lo mejor es que es el mismo todos los días», dijo el piloto de los Tigres, A.J. Hinch. «Remontándome al año pasado, cuando estaba cerca de los 500 (jonrones), ha manejado todo esto con mucha clase, dignidad, y cualquier otro adjetivo que se les ocurra».
Su siguiente oportunidad de llegar a 3.000 hits será este jueves ante el zurdo de los Yanquis, Jordan Montgomery.
«Adoro a Miggy y tuve la gran fortuna de jugar con él», dijo Boone. «Es muy importante para mí, y sé que lo va a lograr pronto, pero si resulta que es contra nosotros, solo espero que no nos lastime mucho».
Green (1-1) admitió el doblete de dos anotaciones de Harold Castro en el sexto inning que igualó la pizarra 3-3, pero Josh Donaldson negoció boleto ante Drew Hutchinson (0-1) para abrir la séptima entrada, y el corredor emergente Tim Locastro llegó a la antesala cuando el venezolano Gleyber Torres se sacrificó y el tiro de Hutchinson salió desviado de la intermedia para un error.
Inmediatamente después, Isiah Kiner-Falefa disparó un indiscutible al siguiente lanzamiento para darles a los Yanquis ventaja de 4-3.
Anthony Rizzo pegó su cuarto jonrón de la temporada, añadió un doblete, impulsó dos carreras y se robó una base por los Yanquis.
Por los Yanquis, el venezolano Gleyber Torres de 4-0.
Por los Tigres, los venezolanos Cabrera de 4-3 con una anotada; Harold Castro de 3-1 con dos producidas; Víctor Reyes de 4-2 con una impulsada. El dominicano Jeimer Candelario 4-2 con dos anotadas. El puertorriqueño Willi Castro de 1-1.